martes, 9 de octubre de 2012

COMENTARIO SOBRE LA LEY DE REFORMA MAGISTERIAL


Por encima de situaciones particulares debiéramos entender que el tema de la educación pública no debiera reducirse --- por muy importante que sea – a un aumento de sueldos o a una promesa de cumplirlos en un futuro cercano ya que ellos sería puro economicismo o gremialismo que tantas veces ha ocurrido. Creo, como muchos, que debiéramos aprovechar la situación para iniciar el largo camino de transformar la educación pública generando consensos, afinando propuestas, pero poniendo por delante la necesidad nacional de contar con una educación de calidad para nuestros niños y nuestros jóvenes.

Para ello contamos con referentes, con compromisos largamente agendados y trabajosamente aprobados como son el Acuerdo Nacional que consideró un mayor porcentaje del presupuesto para la educación, contamos con el Plan Educativo Nacional que es el instrumento básico para el cambio educativo a nivel nacional y la mayoría de los departamentos cuentan con Proyectos Educativos Regionales y con los Planes de Desarrollo Concertados que dan un tratamiento preferencial a la educación y a la salud. Se trata entonces de colocar estos documentos al centro o como guías del debate actual, como elementos orientadores y vinculantes en las decisiones inmediatas o de corto plazo ya que no hacerlos nos condena a ser prisioneros del momento actual.

Es en este marco en el que debemos ubicar las normas vigentes o en proceso de aprobación relativas a tratar la situación laboral de los docentes del país y tratar esa dimensión implica abordar varios factores, entre ellos: la carrera pública magisterial (ingreso, ascensos, evaluaciones, etc.), los deberes, derechos, los estímulos, las remuneraciones (sueldos, asignaciones e incentivos), la jornada laboral y también se tiene que contemplar el caso de los contratados, reasignados y personas de servicio. Como vemos el asunto de remuneraciones es uno de los componentes de este delicado y complejo tema.

Sobre este asunto y al calor de una huelga magisterial se han presentado hasta cuatro opciones normativas para enfrentar o tratar el asunto de la reforma magisterial: unos plantean la vigencia plena de la Ley del Profesorado 24029 – 25212 (1987 – 1990), la Ley de Carrera Pública Magisterial 29062 (2007 – 2011), el Proyecto de Ley de Reforma Magisterial (presentada por el Poder Ejecutivo y en proceso de aprobación) y  por su parte el SUTEP ha presentando al Congreso el Anteproyecto de Nueva Ley del Profesorado.

Nos permitimos presentar un breve comentario en relación a las propuestas planteadas. La primera opción no tiene muchos adeptos ya que se trata de una norma largamente incumplida y después de la cual se han sucedido muchas situaciones que complican el plantear su vigencia, sin embargo sabemos que un sector del magisterio lo está planteando. La defensa de la Ley de Carrera Pública Magisterial ha sido asumida por un sector importante de congresistas en el debate que se ha suscitado semanas atrás y que parece tener dos problemas serios: que hasta la fecha han ingresado a la carrera pública magisterial sólo 25,000 docentes de los cerca de 200,000 existentes y que su aplicación ha generado fuertes resistencias y un cisma entre los docentes y a nivel de centros educativos. La propuesta de Ley de Reforma Magisterial es la que actualmente está en debate, ha sido propuesta desde el Ministerio de Educación, ha sido presentada al Congreso para su debate y es la norma que la mayoría parlamentaria estaría decidida a aprobarla. Finalmente la propuesta del SUTEP no contaría con el respaldo parlamentario suficiente y las posibilidades de imponerla desde las calles no parece viable (lo que no quiere negar que se mantenga como bandera de sectores del magisterio)

Por todo lo expuesto consideramos pertinente que los docentes, los padres de familia y los estudiantes aprovechen las grandes expectativas generadas, la amplia cobertura informativa (a veces desinformativa) y el debate parlamentario para que TODOS los temas relativos a la situación de los docentes se aborden y en tal sentido consideramos pertinente que se alienten espacios de información, de discusión y de propuestas sobre la Ley de Reforma Magisterial que está en trámite en el Congreso y que pronto será puesta a debate para su aprobación.

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